Es todo lo que podemos decir después del éxito de la inauguración del Banco de Semillas Variedad Local Alpujarra
Este banco es fruto del trabajo realizado durante dos años por nuestro equipo, pero sobre todo, del trabajo de agricultores y agricultoras que han cuidado durante generaciones las semillas tradicionales y han aportado parte de ellas, además de todo su saber, para garantizar su supervivencia. Gracias también a Cádiar y su gente por la acogida
Recordamos que a partir de ahora, el Banco dará servicio a cualquier agricultor o agricultora de La Alpujarra y su funcionamiento será el siguiente:
Abrirá para la entrega y recepción de semillas cuando se aproxime el tiempo de sembrar las almácigas y otras temporadas de siembra.
Cualquier persona que quiera cultivar las semillas conservadas en el banco podrá solicitarlas.
Quien quiera podrá aportar sus semillas al banco, para que no se pierdan y que las siembren otras personas dedicadas a la hortelanía.
Se llevará un registro y control de las semillas que entran y salen.
Si necesitáis más información sobre los horarios de apertura del Banco de Semillas, acudid al Ayuntamiento de Cádiar o contactando por teléfono, llamando al 958 76 80 31.
El próximo viernes 6 de octubre de 2023, a las 12h, os invitamos a la inauguración del Banco de Semillas «Variedad Local Alpujarra» en Cádiar (Plaza de la Iglesia), impulsado desde el proyecto Smart Ecomountains con la colaboración del Excmo. Ayuntamiento de Cádiar.
El Proyecto Smart Ecomountains pretende impulsar el desarrollo económico y social de La Alpujarra a través del estudio y puesta en valor de los recursos que ofrece la biodiversidad asociada a la agricultura. La práctica tradicional de la agricultura en La Alpujarra ha contribuido a la generación de la biodiversidad en el macizo de Sierra Nevada y ha sido un elemento básico en la economía de los municipios de montaña. Actualmente existe un gran patrimonio acumulado de variedades locales de cultivo y modos culturales de manejo de la tierra que están en franca regresión. Conservar las variedades locales nos ayuda a alimentarnos mejor.
Este banco es el resultado de dos años de trabajo en el proyecto Smart Ecomountains, recuperando y multiplicando semillas de variedades de cultivo muchas veces olvidadas y casi desaparecidas, gracias a la colaboración de agricultores y agricultoras de la comarca, ayuntamientos y otras instituciones y asociaciones.
A partir de ahora, el Banco será la sede de la biodiversidad alpujarreña, abierto al público para el intercambio de semillas y sobre todos, para custodiar la riqueza de los cultivos de esta tierra, siendo sus objetivos:
Custodiar una colección de semillas de variedades locales de La Alpujarra. Incluyendo las aportadas por la el proyecto Smart Ecomountains.
Facilitar semillas a quien quiera cultivarlas.
Recibir semillas de quien quiera aportarlas en el banco.
Ser un lugar de intercambio y encuentro entorno alas semillas locales.
Organizar actividades de intercambio de semillas y colaborar en ferias, talleres, exposiciones, etc.
Promocionar las semillas y productos agrícolas de variedades locales de La Alpujarra.
El funcionamiento del banco será el siguiente:
El banco abrirá para la entrega y recepción de semillas cuando se aproxime el tiempo de sembrar las almácigas y otras temporadas de siembra.
Cualquier persona que quiera cultivar las semillas conservadas en el banco podrá solicitarlas.
Quien quiera podrá aportar sus semillas al banco, para que no se pierdan y que las siembren otras personas dedicadas a la hortelanía.
Se llevará un registro y control de las semillas que entran y salen.
Además, en la inauguración, contaremos con actividades como una exposición de productos de variedades locales alpujarreñas, un taller de extracción de semillas, y una cata de tomates.
La celebración de la XIX Feria Andaluza de la Biodiversidad Agrícola que tuvo lugar en Cádiar los días 23, 24 y 25 de septiembre convocó a cientos de personas comprometidas con la conservación de nuestro patrimonio de semillas nativas y alimentos del terreno
Una instantánea de la Plaza del Ayuntamiento de Cádiar durante la Feria
Bajo el lema “Semillas de tradición, cosecha de futuro” La Alpujarra granadina se convirtió en el epicentro de la biodiversidad agrícola durante los días 23, 24 y 25 de septiembre. Fueron unas jornadas de trabajo y convivencia activa entre diferentes grupos interesados en el intercambio de semillas de toda Andalucía, pequeños productores que trabajan en el marco de una agricultura comprometida con el medioambiente, grupos de consumidores que desean practicar un consumo más ecológico, responsable y transformador, y proyectos de investigación que tienen como objetivo generar conocimiento para apoyar las iniciativas locales y regionales en favor de la biodiversidad cultivada.
La XIX Feria Andaluza de la Biodiversidad Agrícola, celebrada durante casi dos décadas por la Red Andaluza de Semillas, ha sido coorganizada este año por el equipo del proyecto de la Universidad de Granada “Agrobiodiversidad y desarrollo para las comunidades locales de montaña” asociado al Centro Temático sobre ecosistemas de montaña, teledetección e Inteligencia Artificial Universidad de Granada-Sierra Nevada (Smart EcoMountains). Dicho centro temático está regulado por el Convenio entre el Ministerio de Ciencia e Innovación y la Universidad de Granada y cofinanciado por FEDER para actuaciones relacionadas con la e-infraestructura europea LifeWatch-ERIC en Andalucía y Diputación de Granada. Así mismo, la Asociación local La Colmena, la Red Agroecológica de Granada y el Ayuntamiento de Cádiar han sido coorganizadores esenciales del evento.
Durante la feria, y compartiendo un espacio único y abierto de casetas para la exposición y para la celebración de sesiones científicas, se realizaron actividades tan diversas como el intercambio de semillas, la celebración de mesas redondas con académicos, agricultores y pequeñas empresas de transformación, la realización de catas de tomates y vinos, la exposición de platos elaborados con productos locales, la impartición de talleres de extracción de semillas, elaboración de pan con harinas de trigo antiguo o la actuación musical por parte del grupo de trovos local.
El sábado, en las mesas se habló de la importancia de las variedades tradicionales de cultivo en el contexto actual de transición hacia sistemas agroalimentarios más sostenibles, así como del valor de la diversidad cultivada para la resiliencia frente al cambio climático y para la seguridad alimentaria a nivel local y global. José Esquinas-Alcázar, Doctor Ingeniero Agrónomo, se refiere al Tratado Internacional sobre Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura, del que fue artífice durante su trabajo en la FAO, destacando el artículo 9 de dicho tratado, que se refiere a los derechos de los agricultores tradicionales que han desarrollado sus semillas de variedades locales a lo largo de los siglos y las han conservado para las generaciones futuras.
El domingo, los protagonistas fueron los grupos de consumo y las redes de productores-consumidores de Granada y Almería que ofrecieron su bagaje en la construcción de distintas formas organizativas para una nueva relación entre productores y consumidores a través de la innovación, la cooperación y la responsabilidad compartida.
La última mesa para el encuentro y el diálogo fue la que cerró el evento presentando el futuro de la agricultura desde una mirada intergeneracional. El cambio climático y otras incertidumbres que se ciernen sobre el sector, tales como el relevo generacional y la falta de apoyo a la agricultura en el contexto de la multifuncionalidad del mundo rural, fueron temas recurrentes para jóvenes y mayores.
La Feria ha albergado también la primera cita del Mercado Agro-Arte-Sano de Cádiar, que reunió en la localidad a una veintena de puestos y que promete convertirse, en sus próximas convocatorias mensuales, en un referente del comercio de proximidad en la comarca.
Pero las máximas protagonistas fueron, sin duda, las semillas. En la Plaza del Ayuntamiento de Cádiar se encontraron más de una decena de grupos, venidos de distintos puntos de Andalucía, dedicados a la conservación, intercambio y cultivo de variedades agrícolas locales, que, como en todas las citas de esta Feria, establecieron nuevos contactos y llevaron a la población local todo su conocimiento y entusiasmo por la biodiversidad agrícola. Un tesoro, el de las semillas, que no es sino el resultado del trabajo de selección e intercambio de los agricultores durante generaciones. Un legado de biodiversidad y de saberes campesinos que han dado vida al territorio andaluz, alimentando a su población y cuidando del territorio. Muchos son los grupos de todas las provincias que han estado en la Feria con el propósito de mantener vivo este patrimonio en los huertos de la Alpujarra y de toda Andalucía, uniendo tradición y futuro a través de las personas.
La Feria se despidió con el concierto del coro clave de Cádiar, una comida popular de productos del terreno, la fritaílla, y la lectura de una Declaración Final que resume las intenciones de esta Feria, y que se puede consultar aquí.
En el marco de la XIX Feria Andaluza de la Biodiversidad Agrícola que se celebrará en Cádiar los días 23, 24 y 25 de septiembre de 2022, os invitamos a participar en la Muestra de platos elaborados con variedades tradicionales de La Alpujarra. Con esta muestra, queremos contribuir al desarrollo sostenible a través de la protección y promoción del patrimonio natural y del patrimonio cultural inmaterial que supone la cocina con variedades tradicionales de la tierra.
¿En qué consiste la muestra?
El domingo 25 de septiembre, se habilitará un espacio para exponer los platos elaborados, de 13 a 14:30h. Quienes hayan aportado su plato nos hablarán brevemente del mismo, y podremos compartir el resultado de su buen hacer culinario.
¿Qué necesito para participar?
Solo se aceptarán aquellos platos que se realicen con, al menos, una variedad tradicional de La Alpujarra, y que se hayan inscrito previamente en el siguiente formulario: https://forms.gle/1xwP7446v1jWHygw6. Solo se admitirá un número cerrado de inscripciones, que se podrán realizar hasta el 18 de septiembre, ¡así que no pierdas tiempo, piensa tu receta e inscríbete ya!
¿Qué obtengo si participo?
Todas las personas que acudan con su plato a la muestra obtendrán un obsequiomuy especial para acompañar sus mejores platos, y además tanto su nombre como su plato aparecerán en el recetariocon variedades tradicionales que estamos preparando desde el proyecto Smart Ecomountains, al que pertecece Variedad Local Alpujarra.
¿Y si no puedo acudir presencialmente a la muestra?
También puedes participar dejándonos tu receta en el mismo formulario: https://forms.gle/1xwP7446v1jWHygw6, e igualmente incluiremos tu receta y nombre en nuestro recetario.
Recuerda que la muestra tiene plazas limitadas y la inscripción estará abierta hasta el 21 de septiembre (inclusive), y que para cualquier duda puedes encontrarnos en el correo electrónico variedadlocalalpujarra@gmail.com, y en nuestras redes sociales Facebook y Twitter.
A continuación compartimos el cartel y el programa provisional de la XIX Feria de la Biodiversidad Agrícola, que, con el lema «Semillas de tradición, cosecha de futuro», se celebrará en Cádiar del 23 al 25 de septiembre, y que estamos organizando junto a la Red Andaluza de Semillas, el Exmo. Ayuntamiento de Cádiar, la Asociación La Colmena y la Red Agroecológica de Granada.
La biodiversidad es la razón de ser de LifeWatch ERIC, y desde Variedad Local Alpujarra queremos celebrar el Día de la Biodiversidad 2022 con una selección de especies y variedades recogidas a lo largo y ancho de la comarca alpujarreña granadina que hemos publicado a lo largo de esta semana en nuestras redes sociales. Aunque no es más que una pequeña muestra, da buena cuenta de toda la agrobiodiversidad que encontramos en La Alpujarra y en Sierra Nevada.
Como siempre, puedes dejarnos tus preguntas o comentarios aquí, en la sección de contacto, o a través de nuestras redes sociales en Facebook y Twitter.
Hoy os contamos cómo la asociación y compromiso de un grupo de agricultores y productores locales en torno a la panadería, lograron crear un producto diferenciado, de calidad y rentable, logrando el distintivo de Denominación de Origen Protegido.
CONTEXTO
La provincia de Siena, situada dentro de la Toscana italiana, ha sido tradicionalmente una zona de producción de trigo harinero, especialmente en los valles de Orcia, Elsa, Arbia y Chiana. Pero debido a la mala colaboración que había entre los productores locales, la producción no adecuada y poco organizada del trigo harinero y la fuerte influencia ejercida por los intermediarios en las cadenas de suministro, provocó que los productos no fuesen especialmente rentables y el sector no desarrollase todo su potencial.
En las últimas décadas, muchos consumidores, frente a un sistema alimentario globalizado y de poca calidad, comenzaron a cambiar su comportamiento y orientando sus preferencias hacia lo local. Buscan productos elaborados con ingredientes locales que puedan garantizar altos estándares de calidad y cuyas cadenas productivas son rastreables y transparentes. Además, muchos clientes están dispuestos a pagar más por productos diferenciados y que son ambientalmente sustentables, así como que aseguren una justa remuneración a los productores, en particular a los agricultores.
A partir de la observación de este nuevo perfil de consumidores en pleno crecimiento, se brindó una importante oportunidad a los productores y procesadores locales de la provincia de Siena, que decidieron apostar e intentar desarrollar el potencial del sector harinero, organizando mejor su trabajo a través de la creación de un modelo de cadena de suministro corta que podría garantizar, por un lado, una mejor viabilidad de todos los emprendedores involucrados, y por otro lado, agregar valor al pan local.
En torno a esta idea nació el Proyecto Innovapane,promovido por el molino harinero de Giambastiani, que reunió en torno a 50 explotaciones agrícolas productoras de trigo y a varias panaderías locales para promover la introducción de variedades tradicionales de trigo. Para lograr el éxito del proyecto, se contó con el apoyo de las Universidades de Pisa y Florencia y diferentes medidas del PDR. Para poder financiarlo, se obtuvieron subvenciones para el desarrollo rural mediante fondos FEADER, una gran inversión a nivel nacional y regional y aportación privada.
El proyecto gira en torno a dos objetivos principales: agregar valor a la producción local de trigo y ayudar a los productores locales a ser más competitivos en el mercado, aumentando los estándares de calidad del pan y encontrando nuevos canales de comercialización. Con esta finalidad, se abordaron objetivos específicos para alcanzarlos eficientemente:
Mejorar la calidad del trigo local.
Promover la introducción de las variedades tradicionales de trigo más rentables y sostenibles ambientalmente. Sus características hacen que se adapten a las condiciones locales, pudiendo mejorar la calidad del pan al mismo tiempo que contribuyen a preservar la biodiversidad.
Obtener la denominación de origen protegida para el pan como “pan toscano DOP” (Pane Toscano DOP).
Definir un acuerdo de cadena de suministro que permita alcanzar una mayor equidad en la remuneración de todos los actores involucrados en la cadena de suministro, desde la producción primaria hasta la distribución final en el mercado.
Organizar a todos los actores involucrados en la cadena de suministro, generar beneficios económicos para toda el área y no solo para unas pocas empresas.
Establecer los protocolos de producción más adecuados a ser utilizados por todos los productores de trigo harinero para mejorar la calidad de la producción.
Además, la preservación de los productos tradicionales y los valores culturales se consideró como un objetivo indirecto y horizontal del proyecto.
ACTIVIDADES REALIZADAS PARA EL DESARROLLO DEL PROYECTO
Como ya se destacó anteriormente, este proyecto integrado fue apoyado por tres medidas de PDR y se implementó entre 2011 y 2015. Las actividades apoyadas por estas medidas se pueden dividir en seis bloques principales:
1. Ensayos experimentales de variedades locales de trigo. Este grupo de actividades comprendía: la selección de las variedades a utilizar; la creación y gestión de los campos experimentales; seguimiento del ciclo de producción y el análisis de las propiedades organolépticas de la harina adquirida. Estas actividades fueron realizadas por la Universidad de Florencia en colaboración con una explotación agrícola.
2. Establecer y desarrollar un modelo para prever los parámetros de calidad del trigo harinero y la harina producidos por la Universidad de Florencia.
3. Identificación de la población microbiana de la levadura natural por la Universidad de Pisa.
4. Evaluación de las posibles alteraciones que las condiciones ambientales y los protocolos de trabajo puedan tener sobre la levadura natural y por tanto sobre los productos finales. La Universidad de Pisa realizó un análisis de las condiciones laborales y ambientales en todas las granjas involucradas en el proyecto, para así tener una idea clara de los elementos que podrían influir en la calidad de la harina producida.
5. Identificación de las mejores condiciones a respetar para liofilizar la levadura natural para reducir sus posibles alteraciones, implementadas por la Universidad de Pisa en estrecha colaboración con los agricultores.
6. Actividades de comunicación y difusión. Parte de la financiación fue utilizada principalmente por los agricultores para modernizar sus equipos y adaptarlos a los estándares exigidos por las especificaciones de producción enumeradas dentro de la Denominación de Origen Protegida. Se financió todas las actividades relacionadas con la definición de las especificaciones de producción antes mencionadas y la definición y desarrollo de un conjunto de reglas que promueven la transparencia y la trazabilidad. En particular, la Universidad de Pisa, en colaboración con el molino Giambastiani, trabajó en la definición de un sistema informativo que puede garantizar la recopilación de datos relacionados con las materias primas utilizadas por cada panadería involucrada en el proyecto y con los productos finales enviados al mercado. Además, se dedicó una línea de actividades a la identificación de marcadores organolépticos, cuya presencia en el producto final permite identificarlo como pan certificado.
El líder del proyecto, la planta Giambastiani, fue responsable de todas las actividades vinculadas a la gestión y organización de la asociación. Fue responsable de facilitar la participación de todos los socios, organizar todas las reuniones y gestionar las comunicaciones internas, lo cual fue una tarea crucial considerando la gran cantidad de actores involucrados y su variedad. Además, el socio principal ayudó a todos los demás socios en la preparación de las solicitudes de financiación, las solicitudes de pago y preparó los informes intermedios y finales del proyecto.
RESULTADOS
Resultados principales
Se lograron los objetivos generales de agregar valor a la producción local de trigoharineromediante la obtención de un DOP y pan y de crear una cadena corta de suministro organizada que pudiera distribuir la remuneración económica a todos los actores involucrados. Participaron 50 fincas, para una producción que alcanzó las 2,5 mil toneladas de trigo harinero en 2014, procesado por el molino Giambastiani y distribuido a 13 panaderías que producían pan certificado como pan toscano DOP.
La participación de las Universidades de Florencia y Pisa permitió identificar las principales características que debe tener el pan para ser certificado y su trabajo también fue importante para ayudar a racionalizar el sistema productivo.
Los resultados específicos del proyecto fueron:
• El desarrollo y la adopción del modelo de trazabilidad. Este sistema web permite recopilar toda la información relacionada con la producción de pan, desde la producción de pan de trigo hasta su almacenamiento, procesamiento y entrega a las panaderías hasta la producción de pan certificado y su venta.
• El consorcio agrícola de Siena definió un protocolo común para la producción de trigo harinero, que fue adoptado por todas las explotaciones participantes en el proyecto.
Este protocolo común incluye indicaciones sobre cómo planificar la producción y sobre el uso de insumos de producción que permitieron a los productores alcanzar los altos estándares de calidad previstos para obtener la certificación.
• Las actividades realizadas por las Universidades y las fincas permitieron seleccionar las mejores variedades locales de trigo harinero, tanto en términos de sostenibilidad ambiental como de desempeño económico.
• Se definió un acuerdo detallado de la cadena de suministro. Esto aseguró la estabilización del precio de mercado con el consiguiente reconocimiento de precio justo a los productores que suscribieron el acuerdo. Además, también aseguró que una cantidad fija de trigo harinero producido sea comprado por panaderías locales a un precio establecido para producir pan certificado.
• Actividades de difusión. Se organizaron una serie de ferias locales, reuniones y talleres para informar a la gente sobre los resultados del proyecto. Las organizaciones de estos eventos públicos también tenían el alcance de involucrar a productores adicionales dentro del proyecto.
Experiencias como la de Innovapane nos enseñan que apostar por los productos locales y las variedades tradicionales, no solamente es posible, sino que puede beneficiar a los distintos actores implicados, y de manera general, a toda la población.
Conocer las variedades agrícolas típicas de la Alpujarra granadina es también conocer su empleo en la cocina. Por eso, estamos recopilando recetas que empleen estas variedades, que compartiremos en nuestras redes. Hoy presentamos la primera de ellas, una genial conserva: pimientos aíces en vinagre. Si conoces algunas curiosidades sobre esta receta, o quieres compartir otras, déjalas en los comentarios.
Este banco es fruto del trabajo realizado durante dos años por nuestro equipo, pero sobre todo, del trabajo de agricultores y agricultoras que han cuidado durante generaciones las semillas tradicionales y han aportado parte de ellas, además de todo su saber, para garantizar su supervivencia. Gracias también a Cádiar y su gente por la acogida 
Recordamos que a partir de ahora, el Banco dará servicio a cualquier agricultor o agricultora de La Alpujarra y su funcionamiento será el siguiente:
Abrirá para la entrega y recepción de semillas cuando se aproxime el tiempo de sembrar las almácigas y otras temporadas de siembra.
Cualquier persona que quiera cultivar las semillas conservadas en el banco podrá solicitarlas.
Quien quiera podrá aportar sus semillas al banco, para que no se pierdan y que las siembren otras personas dedicadas a la hortelanía.
Se llevará un registro y control de las semillas que entran y salen.
Si necesitáis más información sobre los horarios de apertura del Banco de Semillas, acudid al Ayuntamiento de Cádiar o contactando por teléfono, llamando al 958 76 80 31.
20 de abril
Puntos de encuentro en Cádiar, Juviles, Pórtugos y Órgiva
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